Escándalo de los relojes sacude mandato de Boluarte”
Lima (EFE).- Perú enfrenta una nueva crisis política tras el inesperado allanamiento a la residencia de la presidenta Dina Boluarte y al Palacio de Gobierno. Un equipo policial y fiscal llevó a cabo la operación en busca de relojes de lujo no declarados por la mandataria, desencadenando una jornada de caos y tensión en la capital.
La ausencia de Boluarte en citaciones del Ministerio Público para mostrar los relojes, alegando una agenda cargada, generó controversia. A pesar de ello, las autoridades la acusaron de actuar en rebeldía, exacerbando las tensiones en el país.
El allanamiento, autorizado por una orden judicial, fue precedido por la llegada de un numeroso equipo de fiscales y policías a la residencia de Boluarte en Surquillo, seguido por horas de búsqueda en el Palacio de Gobierno. Estas acciones fueron criticadas como desproporcionadas e ilegales por el gobierno y sus seguidores.
El país se dividió entre aquellos que vieron la oportunidad de destituir a Boluarte y los que la defendieron, profundizando las tensiones políticas. La presidenta, en un pronunciamiento público, denunció el allanamiento como arbitrario y reiteró su disposición a colaborar con la investigación.
La incertidumbre continúa en Perú mientras la población espera respuestas sobre el origen de los relojes y el futuro político del país.
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